Hace algún tiempo, el periódico La Verdad publicaba un artículo del problema que se ha generado con el comienzo de urbanizar el sector rambla. Y el problema es qué hacemos con las fiestas de Cartagineses y Romanos, declaradas de interés turístico internacional.
¿Dónde ubicamos el campamento? ¿tendremos que disgregar el campamento por las distintas plazas de la ciudad? o, tal y como proponían en la noticia, llevar el campamento a la zona de expansión del Mandarache y aplazar el mismo problema unos años.
Nosotros ofrecemos una solución que, tal vez, sería definitiva. Actualmente, el recinto de la rambla, donde año tras año se ha montado el campamento festero y el recinto ferial, dispone de 55.000m2.
Hay unos terrenos que podrían solucionar el problema para siempre. Están a la misma distancia de la plaza del Ayuntamiento que el actual campamento y, potenciaría la fachada marítima de nuestra ciudad, dándole a los restaurantes más característicos de cocina marinera un protagonismo de primer nivel para unas fiestas históricas de interés turístico internacional.
El solar está en la antigua fábrica de plomo de Peñarroya que cuenta con una superficie de 59.000m2 nada menos y que, después de un buen lavado de cara, sería perfecta para albergar nuestras fiestas de septiembre.
Creemos que, aunque parece imposible que una ciudad como Cartagena pueda desarrollar esta idea, debido sobre todo a lo que cuesta aquí hacer cosas, no es descabellada y nuestra ciudad ganaría un espacio multiusos para, por ejemplo, recibir espectáculos como el Circo de los horrores u otros eventos parecidos.
Imaginad qué vistas desde la noria, las mismas vistas de cuando éramos niños y los caballitos nos esperaban en los meses de invierno, en aquel desconocido y mágico puerto. Puerto natural y antiguo, codiciado por todas las civilizaciones de nuestra historia.
Críticos de Cocina.
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Eso está un poco a tomar por saco del centro de la ciudad. No me imagino un desfile lleno de gente con ese recorrido