El Ayuntamiento de Cartagena ha querido rendir homenaje al alma de la ciudad: sus pequeños comercios. Esos que resisten al paso del tiempo, que conocen a cada cliente por su nombre y que forman parte de la vida diaria de los barrios y pueblos. Así nacen los primeros Premios al Comercio Local, impulsados por el Área de Comercio y que reparten un total de 7.500 euros entre cinco establecimientos reconocidos por su trayectoria, compromiso y creatividad.
Los galardones se entregarán el próximo 15 de noviembre en el centro cultural Ramón Alonso Luzzy, en una gala que servirá para poner en valor el trabajo silencioso pero esencial de quienes levantan cada mañana las persianas de sus negocios con esfuerzo, constancia y una sonrisa. La edil de Comercio, Belén Romero, ha destacado la gran acogida de esta primera edición, que ha recibido más de una veintena de candidaturas propuestas por asociaciones y colectivos como la patronal COEC, el Centro Comercial Abierto, La Milla, la Asociación de Mujeres Empresarias o las agrupaciones comerciales de Los Belones, la calle San Fernando y el Mercado de Santa Florentina.
“Desde el Ayuntamiento de Cartagena reconocemos al comercio local por su entrega, su dedicación y su compromiso de estar siempre con los vecinos”, ha afirmado Romero. Cinco historias han sido las elegidas para estrenar estos premios que, más allá del reconocimiento económico, celebran la autenticidad, la cercanía y la capacidad de adaptación del pequeño comercio cartagenero.
El Premio Raíces ha sido para Curtidos Puche, un negocio familiar ubicado en la calle Canales, con más de cuarenta años de vida. En su taller aún se respira el olor a cuero y tradición, pero también la innovación de una segunda generación que ha sabido actualizar el oficio sin perder su esencia. Curtidos Puche no solo vende materiales, sino que transmite conocimiento y pasión por un arte que forma parte del patrimonio artesanal de la ciudad.
En el Paseo Alfonso XIII se encuentra Papelería Dante, que ha recibido el Premio Compromiso por su ejemplo de superación e inclusión. Desde 1982, esta librería y papelería ha acompañado a generaciones de estudiantes, familias y profesionales. Su propietaria, una mujer con discapacidad que ha hecho de la perseverancia su bandera, y su fiel colaborador han creado un espacio de confianza y ayuda mutua. Además de atender al público, promueven formación y empleo para jóvenes y personas en inserción laboral, demostrando que la solidaridad también se escribe entre estanterías llenas de libros y material escolar.
El corazón del Mercado de Santa Florentina late con fuerza gracias a la Frutería Aurelia, que ha obtenido el Premio Leyenda. Fundada en 1953 por Doña Aurelia, este puesto ha sobrevivido a tres generaciones, reformas y cambios, sin perder la calidez del trato y la calidad de sus productos. Sus mostradores rebosan de frutas frescas y sonrisas de confianza, testimonio de un negocio que representa el alma viva del mercado cartagenero.
Más reciente, pero igual de inspiradora, es la historia de Smuytu, ganadora del Premio Ideas. En la calle San Fernando, esta tienda-taller combina la venta de productos artesanales con talleres creativos que impulsan la sostenibilidad y la economía circular. Su filosofía mezcla arte, educación y compromiso social, colaborando con colegios y asociaciones vecinales. En poco tiempo, Smuytu se ha convertido en un punto de encuentro donde la creatividad florece entre pinceles, materiales reciclados y una visión positiva del futuro del comercio urbano.
Y desde Los Belones, la Panadería El Guitarrilla ha conquistado el Premio Vecinos. Durante más de treinta años, su horno ha sido testigo de amaneceres y conversaciones cotidianas. Panes, dulces y tradiciones que se renuevan con cada generación. Su nombre evoca una historia familiar que mezcla música y masa madre, y su mostrador es el reflejo de una comunidad unida por el sabor de lo artesanal.
Cinco comercios, cinco formas de entender la vida y el trabajo. Curtidos Puche, Papelería Dante, Frutería Aurelia, Smuytu y Panadería El Guitarrilla son más que tiendas: son lugares donde se teje la identidad de Cartagena. En sus historias se reconoce la entrega de quienes sostienen el pulso humano de la ciudad. Y en esta primera gala del comercio local, el Ayuntamiento les devuelve un merecido aplauso por ser, día tras día, parte del alma viva de Cartagena.








