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Ahora que tenemos tiempo para reflexionar un poco, de ordenar nuestras ideas, ahora que este encierro necesario para un bien mayor nos posibilita a resetear el ritmo vertiginoso de la propia vida, miles de imágenes acuden a mi mente. La más recurrente es el mar. El mar de esta antigua ciudad que nos vio nacer, una ciudad que ya ha pasado por epidemias como la que estamos viviendo, una ciudad que cayó y se levantó cientos de veces. Ahora, cuando todo esto pase, toca levantarse de nuevo. Luchar por salir adelante, si excusas, sin miedos. Con la fortaleza de ser quienes somos, el legado de aquellos hombres y mujeres que lucharon por esta tierra.
Queremos aprovechar este texto para agradecer y aplaudir a los miembros del personal sanitario que cuidan de nosotros, a los trabajadores no sanitarios de los hospitales que los mantienen en funcionamiento. Queremos agradecer y aplaudir a los miembros de los cuerpos de seguridad del Estado y a los policías locales, que son la medicina para los que no quieren entender la situación.
No nos olvidamos del personal de los supermercados que se arriesgan en estos días y soportan la locura de algunos necios. Agradecemos a los transportistas que nos nutren de lo necesario para sobrevivir. Aplaudimos a los farmacéuticos que están ahí detrás del mostrador 24h. Agradecemos y aplaudimos al personal de empresas energéticas que velan para que la energía no falte en estos momentos. Aplaudimos al ejercito y a nuestra querida Armada que siempre nos ayudan.
Desde ¿Dónde Comemos?, Cartagena. Gracias a todos.
Críticos de Cocina.
Descubre Cartagena. Una ciudad con mar