Según los datos facilitados por HOSTECAR, 8 de cada 10 hosteleros ya tienen todo reservado
El litoral de la Comarca de Cartagena sigue siendo el destino «estrella» para escaparse en el puente de la Asunción de la Virgen María y la afluencia de visitantes se deja ver en las playas en las que en determinados momentos del día no cabe ni una sombrilla y resulta casi imposible coger una mesa en un restaurante sin previa reserva. Los establecimientos ubicados en la costa están llenos de turistas, especialmente nacionales, que han querido aprovechar el puente de agosto para pasar unos días disfrutando de la gastronomía cartagenera, «muchos han aprovechado los días festivos para bajar desde Madrid, Valencia y Andalucía», indica Gestoso, vicepresidente de la Asociación de Hosteleros y propietario de varios locales ubicados en Cabo Palos y La Manga.
Los hosteleros esperan con mucho optimismo este puente y creen que va a ser «muy beneficioso para el sector». José Luis Gestoso asegura que esta semana «el 84% de los locales en zonas del litoral como Cabo Palos, La Azohía o La Manga ya están completos». Y es que con el sol y una temperatura máxima de 30 grados este puente será una misión «casi imposible para encontrar mesa a la hora de comer sin reserva en locales ubicados en la playa». No obstante, las reservas de última hora pueden mejorar estos datos iniciales.
Además, el vicepresidente de HOSTECAR comenta que los fines de semana de este verano están siendo «muy potentes» en la costa con prácticamente «un 100% de ocupación», aunque entre semana la situación la califica de «más floja».
TURISMO DE CRUCEROS
A medida que los residentes del centro de la ciudad optan por trasladarse a las playas cercanas o salir de viaje fuera de la Región, los cruceristas se han convertido en un pilar fundamental para la hostelería. Los hosteleros del casco histórico de Cartagena creen que la llegada de cruceros a puerto está siendo positiva y afirman que «están manteniendo la actividad económica durante la primera quincena del mes de agosto. Los cruceristas están siendo esenciales para ‘salvar’ agosto. Tradicionalmente, agosto es un mes complicado porque muchos de nuestros clientes habituales prefieren pasar sus días de verano en las playas o viajando fuera de Cartagena. Sin embargo, este año, gracias a la afluencia de cruceristas, hemos podido mantener nuestras puertas abiertas» concluye uno de los hosteleros de un restaurante ubicado en el centro de Cartagena.
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